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Mi primera vez haciendo yoga

Actualizado: 22 sept 2018

Hace 4 años decidí que quería empezar a hacer yoga porque quería conectar mi cuerpo con mi mente, ya que había empezado a practicar la meditación.



Después de visitar varios lugares, profesores, y hasta intentar guiarme a través de videos de youtube, decidí inscribirme en una Shala, una shala es el espacio en donde se practica y se enseña yoga. Nunca pensé que esta decisión podría cambiar mi forma de ver la vida, de entenderme a mi misma, de conocer mi cuerpo y de hacerme consciente de muchas cosas que daba por sentado.


Nunca pensé que esta decisión podría cambiar mi forma de ver la vida, de entenderme a mi misma, de conocer mi cuerpo y de hacerme consciente de muchas cosas que daba por sentado.

Así que llegó mi primer día. En la recepción una señora muy amable me preguntó si había hecho yoga antes, yo le contesté que sí, cosa que no era mentira, pero lo que yo no sabía es que es muy distinto practicar, por ejemplo en un gimnasio o videos de youtube, a practicar en una shala.


Entré al salón y coloqué mi mat, al lado de mi había una chica que estaba acostada boca arriba con los ojos cerrado. No sabía si estaba así porque quería o porque ahí empezaban las clases así. Tengo la costumbre de que cuando llego por primera vez a un lugar, me dedico a observar el comportamiento de las personas que están presentes, como hablan, como es su lenguaje corporal, como se dirigen a los demás, etc. para saber de que forma puedo hacer un primer acercamiento. El punto es que después de observarla por un rato, me acosté yo también, en ese instante el profesor entró y dijo: todos de pie.


Inmediatamente me levanté, otras personas entraron al salón y se pusieron en posición. El profesor se ubicó al frente de todos, coloco las manos en forma de rezo frente a su pecho, cerro los ojos, y dijo: inhalen. Todo el mundo inhaló y empezaron a cantar el ohm.


Evidentemente yo no entendía que era lo que estaba sucediendo, en las otras clases a las que había asistido nunca habían hecho eso.


Lo bueno es que conocía algunos mantras, los mantras son palabras, frases o sílabas sagradas que se cantan, ya que desde hace un año en ese momento, había practicado la meditación, y una que otra vez ponía videos en youtube y la verdad es que me gustaban. Nunca había sentido la energía que ese canto me transmitió en ese momento, fue algo indescriptible.


Al finalizar los ohms, el profesor dice: muy bien, todos en tadasana, inhalen, uttanasana exhalen, media uttanasana inhalen, corredor exhalen, la tabla inhalen, la oruga exhalen,  urdhva hastasana (...) Sí, yo tampoco entendí absolutamente nada de lo que acababa de ocurrir, todo el mundo se movía a medida que él iba diciendo todo eso, como si fuera una coreografía, como si formasen parte de un cast y al final de la película comienzan a bailar y te quedas como wtf. Todos sabían que hacer, menos yo.


En este punto no sabía que esperar, afortunadamente el profesor no me vio y rápidamente me coloqué en la postura que yo conocía como perro dos, jamás en la vida había escuchado esas palabras. Admito que debí realizar una investigación previa, o ir a una clase ahí por lo menos a ver, pero bueno.


Sobreviví la clase viendo a la chica que estaba a mi lado e intentando imitarla,  cuando terminamos, el profesor dice: y por último, la postura más importante de toda la práctica, savasana. Todas las personas, incluyendo a la chica, se acostaron boca arriba, evidentemente yo la imité, el profesor apagó la luz, y salió del salón. Estaba exhausta después de aquella clase, así que decidí relajarme, me acosté y poco a poco me fui quedando dormida.


Entre dormida y despierta, escuche la voz al fondo del profesor, decía que poco a poco nos moviésemos, hasta quedar sentados, me desperté rapidísimo y me senté de una vez, creo que nadie notó que me había quedado dormida, o eso espero. Él se sentó al frente como al inicio de la clase y dijo: Inhalen y todos empezaron a cantar de nuevo el ohm, así que los imité pero de repente también empezaron a cantar, Shanti, shanti, shanti, volví a estar perdida como al principio. Luego exclamó Namasté, todos respondieron igual y empezaron a salir.


Terminé la clase a duras penas, sin entender nada de lo que estaba pasando. Yo había hecho algunas de esas posturas pero no a ese ritmo, ni con esos nombres, no sabía que significaba nada. Para mi los términos: respiración ujjayi, bhandas, etc.  era como estar intentando entender mandarín.


Me levanté, recogí mi mat y me fui a mi casa. Cuando llegué me puse a investigar acerca de las asanas -asanas es el nombre que se le da a las posturas en sánscrito- cuáles eran las más comunes y todas las cosas que había escuchado esa mañana.  Al día siguiente decidí entrar a una clase básica, no me había dado cuenta que el día anterior había estado en una clase multinivel, una buena forma me empezar jajaja.


Y bueno esta es la historia del primer día que hice yoga “serio” jajaja.


Espero que si nunca han hecho yoga en una shala, esto los ayude a no estar tan perdidos el primer día, o por lo menos incentivarlos a que investiguen, cosa que no hice yo.


Me encantaría leer cómo fue su primer día practicando yoga, y si les pasó algo como a mi, o si fue una clase perfecta.


Espero que tenga un feliz día.


Namasté.



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